Aunque hoy en día ya prácticamente nadie se separa, todavía hay matrimonios separados y con el divorcio pendiente.
En relación a estos casos cabe de decir que el divorcio, existiendo una sentencia de separación judicial, no es un proceso de modificación de medidas. Es decir, tiene carácter autónomo y se podría decir que empezamos de cero. Lo que se decida en el divorcio puede ser algo totalmente distinto a lo establecido en la separación, que no debe servir de referencia. Todo irá en función de las pruebas que se practiquen en el divorcio.
Mientras en una modificación de medidas lo que se pretende es modificar la sentencia vigente, siendo requisito imprescindible que existan cambios sustanciales respecto a las circunstancias en las que se fijaron las medidas anteriores, en el divorcio lo que se hará es valorar la situación del momento en el que se solicite el mismo, sin tener en cuenta la sentencia de separación vigente ni las circunstancias en las que se dictó.
La Sentencia dictada por la Sección 12ª de la Audiencia Provincial de Barcelona, en fecha de 30 de julio de 2015, ratifica la de primera instancia que redujo las pensiones alimenticias de dos hijos menores de 600 a 300 euros cada uno respecto a lo establecido en la separación, limitándose a valorar con detenimiento las necesidades alimenticias de los hijos del matrimonio en el momento del divorcio, así como las capacidades económicas de ambos progenitores.
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