La lactancia materna es un elemento a considerar, pero de ningún modo debe ser motivo de restricción del régimen de visitas, y mucho menos de su no fijación.
Tras los primeros cuatro o seis meses de vida del bebé, es posible introducir en su dieta otros alimentos alternándolos con la leche materna, que si se produce de forma correcta permite al niño desarrollar un horario suficientemente regular como para pronosticar cuándo querrá ser alimentado (entre las seis semanas y los tres meses), siendo posible saltarse alguna toma, y con la posibilidad de ofrecerle el biberón a partir de las seis semanas (biberón de sustitución, siendo posible incluso utilizar leche materna previamente extraída y conservada, o un biberón de leche preparada al instante).
Ante la lactancia materna, deberá ponerse especial atención a:
a) que haya sido una opción de alimentación adoptada en interés del menor y no como excusa para impedir la relación con el otro progenitor. Ello se hace muy evidente cuando la lactancia se prolonga una vez el niño ya ha introducido otros alimentos.
Debe tenerse en cuenta que la legislación laboral estima que la madre debe reincorporarse a su puesto de trabajo en 16 semanas, considerándose, en consecuencia, que es un momento adecuado para introducir a terceras personas que se ocupen del niño;
b) que la relación del menor con el otro progenitor pueda quedar preservada mediante un sistema de visitas de corta duración, pero muy frecuentes, que permitan al niño integrar al otro progenitor en rutinas cotidianas como un paseo por la tarde, un cambio de pañales o algún baño, etc…
La Sentencia de la Sección 2ª de la Audiencia Provincial de Zaragoza, dictada en fecha de 22 de julio de 2008, establece que la lactancia, en el caso de mantenerse, no debe ser motivo de restricción en el contacto del hijo común con el padre, atendiendo a que si la madre trabaja es obvio que la alimentación es mixta, y los horarios, tomas y visitas pueden ser perfectamente compatibilizadas.
*Fuente del Post: Memento Experto Crisis Matrimoniales. Ediciones Francis Lefebvre.
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